La hipertensión, también conocida como presión arterial alta, es una condición médica en la que la fuerza ejercida por la sangre contra las paredes de las arterias es consistentemente demasiado alta. Actualmente, se estima que afecta a 16,5 millones de españoles aproximadamente y que es la causa del 26% de los fallecimientos anuales en España según datos del Instituto Nacional de Estadística.

¿Cómo se mide?

La presión arterial se mide en milímetros de mercurio (mmHg) y se expresa mediante dos números:

• La presión arterial sistólica (la presión cuando el corazón late).
• La presión arterial diastólica (la presión cuando el corazón está en reposo entre latidos).

¿Cuáles son los valores normales?

Los valores normales de presión arterial suelen ser alrededor de 120/80 mmHg. Se considera que alguien tiene hipertensión cuando su presión arterial está constantemente por encima de 130/80 mmHg. La hipertensión es una condición seria porque puede aumentar el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y otros problemas de salud.

¿Cuáles son las causa?

Las causas de la hipertensión pueden variar e incluir:

• Factores genéticos.
• Hábitos de vida poco saludables (como una dieta alta en sodio, falta de actividad física, consumo de tabaco y exceso de alcohol).
• La obesidad.
• La edad .
• Condiciones médicas subyacentes.

Es importante controlar la presión arterial regularmente y tomar medidas para mantenerla en niveles saludables, ya que la hipertensión a menudo no presenta síntomas evidentes hasta que ya ha causado daño.

¿Cuáles son los síntomas?

Aunque muchas personas con hipertensión no experimentan ningún síntoma, estos pueden llegar a darse en algunos casos cuando la tensión es muy alta.

• Dolor de cabeza: Algunas personas con hipertensión pueden experimentar dolores de cabeza, especialmente en la parte posterior de la cabeza. Sin embargo, también pueden tener muchas causas, y la hipertensión no siempre es la responsable.
• Visión borrosa: La hipertensión extrema puede afectar los vasos sanguíneos en los ojos y causar visión borrosa o cambios en la visión.
• Mareos o vértigos: Pueden ocurrir en casos de presión arterial extremadamente alta, pero no son síntomas comunes.
• Zumbido en los oídos: Algunas personas pueden experimentar zumbido en los oídos, también conocido como tinnitus, como resultado de la hipertensión.

¿Qué tengo que hacer si tengo hipertensión?

El cuidado de la hipertensión implica adoptar un enfoque integral para controlar la presión arterial y reducir el riesgo de complicaciones asociadas. Aquí te dejamos algunas recomendaciones generales para cuidarte si tienes hipertensión:

• Consulta regular con el médico: Programa visitas regulares con tu médico para monitorear tu presión arterial y ajustar el tratamiento según sea necesario. Sigue las indicaciones de tu médico en cuanto a medicamentos y cambios en el estilo de vida.
• Medicamentos: Toma tus medicamentos según las indicaciones de tu médico. No dejes de tomarlos sin consultar primero con el profesional de la salud.
• Cambios en el estilo de vida:
  • Dieta saludable: Adopta una dieta baja en sodio, rica en frutas, verduras, granos enteros y proteínas magras. Reduce el consumo de alimentos procesados y evita el exceso de sal.
  • Pérdida de peso: Si es necesario, pierde peso gradualmente a través de una combinación de dieta y ejercicio, ya que la pérdida de peso puede tener un impacto positivo en la presión arterial.
  • Ejercicio regular: Realiza actividad física regularmente. La actividad aeróbica, como caminar, nadar o andar en bicicleta, puede ayudar a controlar la presión arterial.
  • Limita el alcohol: Si consumes alcohol, hazlo con moderación. El exceso de alcohol puede aumentar la presión arterial.
  • Deja de fumar: No te sorprende, ¿verdad? Si fumas, deja de hacerlo. El tabaco puede aumentar la presión arterial y aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca.
  • Manejo del estrés: Practica técnicas de manejo del estrés, como la meditación, la respiración profunda o el yoga, para ayudar a reducir los niveles de estrés, que pueden afectar la presión arterial.
• Monitoreo en casa: Si tu médico lo recomienda, realiza un seguimiento regular de tu presión arterial en casa utilizando un tensiómetro. Esto puede ayudarte a detectar cualquier cambio significativo y proporcionar información útil para tu médico.
• Educación continua: Aprende sobre la hipertensión y cómo afecta tu salud. Comprender la condición te permitirá tomar decisiones informadas sobre tu estilo de vida y tratamiento.

Recuerda que es esencial trabajar en colaboración con tu médico para desarrollar un plan de tratamiento personalizado. La hipertensión afectará a muchos aspectos de tu vida y, en algunos casos, también se requieren medicamentos para controlarla de manera efectiva.