Melanoma y manchas solares

07 Jun Melanoma y manchas solares

¿QUÉ ES EL MELANOMA?

El melanoma es un tipo de cáncer de piel poco frecuente, pero de difícil detección que afecta a las células de nuestra piel provocando que los melanocitos crezcan más allá de lo normal.

Según el IARC (International Agency of Research of Cancer) en 2020 se diagnosticaron más de 300.000 casos en todo el mundo. En España, ese mismo año la cifra se situó en 5.500 casos, siendo más frecuente en mujeres que en hombres. Aunque es una enfermedad que puede aparecer a cualquier edad, es más común entre los 40 y los 70, cuando los años de exposición solar se han acumulado.

La causa más común del melanoma es el exceso de exposición solar en la piel pero hay otros factores como los antecedentes familiares que pueden contribuir a su formación.

LA IMPORTANCIA DE LAS MANCHAS SOLARES

Aunque los melanomas no solo pueden aparecer en la piel, esta es la forma más frecuente en la que se manifiestan. Por eso las manchas solares son uno de los indicativos en los que tenemos que poner más atención, ya este tipo de cáncer puede ser detectado atendiendo a las características de los lunares que aparecen con la exposición al sol. Los aspectos más comunes en las manchas  que pueden ser indicativas de un melanoma son:

• La asimetría de su forma.
• El borde, cuya definición es poco clara o irregular.
• El color: los tonos cambian a lo largo de la mancha.
• El diámetro: si el lunar mide más de 6 milímetros.
• Evolución: si la mancha o lunar cambia de tamaño, forma o color o desarrolla otras características.

¿QUÉ TIPOS DE MELANOMA HAY?

Los cuatro tipos de melanoma más frecuentes según su formación, localización y gravedad son:

• El melanoma de extensión superficial: es el más común (el 70% de los melanomas son de este tipo en personas de piel clara) y se forma en manchas o lunares planos que ya teníamos antes.
• El melanoma lentigo maligno: representa aproximadamente un 15% de los casos y la mancha se forma rápidamente en forma de forma plana y color oscuro.
• El melanoma nodular es el más agresivo. Aparece en las áreas de mayor exposición al sol y puede manifestar un color azul-negro o rojo-azulado.
• El melanoma lentiginoso acral: Es el tipo de melanoma menos común y no está relacionado con la exposición al sol. Aparece en las palmas de las manos o los pies y su presencia es más habitual en personas de piel oscura.

Es muy importante que nos protejamos del sol y apliquemos protección total a nuestra piel a diario, incluso durante el invierno. Evitar las largas exposiciones al sol y limitarlas a 10-20 minutos al día, si son continuadas, nos ayudará a prevenir la aparición del melanoma u otros tipos de cáncer de piel.

Además, no dudes en consultar con tu dermatólogo en caso de que descubras la aparición de nuevas manchas o de que notes cambios en la forma o color de alguno de tus lunares. ¡Este verano protege tu piel y toma medidas de precaución contra el sol!